Nostalgia

¿Conserváis algún juguete de vuestra infancia? Yo guardo como oro en paño mi Tarta de Fresa, la tengo desde los 5 años, a esa edad me quitaron las amígdalas, la clínica estaba en una céntrica calle de mi ciudad y mientras esperábamos a que me diesen el alta para irme a casa, papá bajó a comprármela a una juguetería que había justo en frente, fue lo único positivo de ese día, la operación fue con anestesia local, la recuerdo como una mezcla entre Saw y Hostel ¡madre mía!, mejor me ahorro los detalles.
Hace años que ya no huele a fresa y ha sufrido algún accidente por el camino, como cuando en una mudanza mi sobri la localizó dentro de una caja y decidió babarla, no sé que tipo de ph tiene la saliva de los niños pequeños, pero consiguió borrarle la cara, ¡del todo!. No os podéis imaginar mi desolación al llegar a casa y verla, lo que lloré ese día, por suerte un tiempo después conocí a alguien que pudo volver a pintársela ¡Rosa te querré eternamente!.

También conservo un oso de peluche, debe llevar conmigo desde que tengo 2 años, mis amigas le apodan "cariñosamente" el oso de Mr. Bean ,son unas cachondas (espero que se capte la ironía), me gusta porque no tiene ese aspecto rechoncho de los osos de ahora, que tienen los ojos más grandes y la frente y hocico más pequeños, el mío se parece a un oso real, hasta el tacto de su pelaje es totalmente diferente.

Juzgad vosotros mismos si realmente guardan parecido...

Seguro que estáis pensando ¿y esto de los juguetes a qué viene?, hace unos días me encontré con este artículo Antes y ahora: Cómo han cambiado los juguetes de tu infancia, al leerlo me invadió la nostalgia como si el mismísimo fantasma de las navidades pasadas se me hubiese aparecido, la verdad es que me trajo muchos recuerdos, llamadme rancia, pero salvo en el caso de los Pin y Pon, creo que los de antes molaban más. Ya veis, en Mon petit monstre también tenemos nuestro punto clásico según que cosas, jajaja.